Desde López Torrijos y Montalvá respaldamos
la iniciativa propuesta por el sector del automóvil para que el gobierno de luz verde a la sexta edición del Plan Pive que se espera aprobar este mismo viernes
con unos fondos de unos 30 o 40 millones de euros.
Después
de tan sólo cinco meses, el PIVE 5 ha superado todas las previsiones y ha
agotado todo su presupuesto después de que se hayan conseguido matricular 364.000
coches nuevos en España en lo que llevamos de 2014, y de los que casi la mitad
de ellos se han matriculado gracias a este incentivo que proporciona casi 2.000 euros para la compra de un nuevo vehículo. En nuestra opinión, es fundamental mantener este efecto dinamizador en
el mercado del automóvil, uno de los más importantes de la industria
española y que por ende pueden ayudar a mejorar la situación general de nuestra
economía de cara a los próximos años.
No hay que olvidarse del importante efecto recaudador (a modo de impuestos) que supone este plan,
puesto que según datos proporcionados por Anfac, el gobierno ha obtenido unos ingresos de 2.000 millones de euros por
los 540 millones de euros que hasta ahora ha invertido el gobierno para
mantener este el PIVE, además de los ingresos indirectos que genera la
utilización de un automóvil para, por ejemplo, el sector asegurador y otros sectores.

Creemos
que el bienestar de este sector es beneficioso para nuestra economía de una
manera especial, ya que además de conseguir un repunte en el consumo interno
también tiene un doble efecto de mayor producción para la industria, con el
consiguiente mantenimiento y refuerzo de los puestos de trabajo. Además se
reafirma a la marca España como un país líder en este sector y del que sus fábricas
se ha convertido en los últimos años en uno de los principales referentes en el
que las grandes marcas confían para fabricar sus nuevos modelos.
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