El sector asegurador volvió a demostrar en 2014 que es un elemento indispensable en la viabilidad de la actividad económica de nuestro país, después de desembolsar 312 millones de euros para hacer frente a indemnizaciones o reparaciones que sufrieron comercios españoles durante 2014.
El 20% de los negocios asegurados en España (de un total de 1,2 millones asegurados) sufrieron algún tipo de percance durante el pasado año, lo que deja un total de 264.795 comercios siniestrados. Incluso en 73.000 casos se produjeron dos o más siniestros, según se desprende de los datos de la Memoria Social del Seguro Español de 2014, documento elaborado por Unespa (patronal del sector asegurador español).
En lo que se refiere al tipo de siniestro, el robo es el que sigue liderando el impacto económico, aunque suelen ocurrir con menos frecuencia que los daños por agua o por incendios. Concretamente, los hurtos supusieron indemnizaciones que ascendieron a más de 80 millones de euros, siendo los bares los que más robos registraron. Los daños por agua, la rotura de cristales y los incendios ocuparon el ranking de mayor número de siniestros durante el pasado año.
En lo que se refiere a la siniestralidad por regiones, fueron Andalucía, Cataluña y Madrid las que registraron una mayor cantidad. Sin embargo, Extremadura y Asturias apuntaron una mayor siniestralidad según el número de pólizas realizadas. Unespa también hace referencia al grado de penetración de este tipo de seguro con respecto al número de habitantes, siendo el País Vasco y Baleares las que más contratan en relación con la población (en un ratio de negocios cubiertos por cada 10.000 habitantes). Murcia, Canarias y Castilla La Mancha ocupan las últimas posiciones de esta clasificación.